¿QUÉ ES LA ALIMENTACIÓN COMPLEMENTARIA?
La alimentación complementaria es definida por la AEPED como “el proceso por el cual se ofrecen al lactante alimentos sólidos o líquidos distintos de la leche materna o de una fórmula infantil como complemento y no como sustitución de ésta”. Es importante recalcar que el alimento principal en la dieta del bebé hasta el año de vida debe ser la leche materna o la leche de fórmula infantil.
¿CUÁNDO INICIAR LA ALIMENTACIÓN COMPLEMENTARIA?
Es importante esperar hasta alrededor de los 6 MESES, ya que es necesario que el cuerpo del bebé adquiera una maduración óptima a nivel de todos los sistemas (neurológico, renal, gastrointestinal e inmune), para ser capaz de tolerar alimentos distintos a la leche. Además, son necesarias destrezas psicomotoras para manejar y tragar los alimentos de forma segura. Generalmente, estos cambios se adquieren alrededor del sexto mes de vida, por eso se recomienda esta edad para el inicio de la alimentación complementaria.
¿Se puede iniciar la alimentación complementaria antes de esta edad?
La AEPED nos indica que una introducción muy precoz puede conllevar riesgos a corto y largo plazo.
A corto plazo:
- Posibilidad de atragantamiento.
- Aumento de gastroenteritis agudas e infecciones del tracto respiratorio superior.
- Interferencia con la biodisponibilidad de hierro y zinc de la leche materna.
- Sustitución de tomas de leche por otros alimentos menos nutritivos.
A largo plazo:
- Mayor riesgo de obesidad.
- Mayor riesgo de eccema ató
- Mayor riesgo de diabetes mellitus tipo 1.
- Mayor tasa de destete precoz, con los riesgos añadidos que esto conlleva.
También es importante saber que retrasar la alimentación complementaria más allá del séptimo mes conlleva algunos riesgos como:
- Carencias nutricionales, sobre todo de hierro y zinc.
- Aumento del riesgo de alergias e intolerancias alimentarias.
- Peor aceptación de nuevas texturas y sabores.
- Mayor posibilidad de alteración de las habilidades motoras orales
* En RECIÉN NACIDOS PREMATUROS no hay un consenso en las recomendaciones científicas, por lo que el comienzo de la alimentación complementaria debe INDIVIDUALIZARSE.
